Furry Madrid

<!--[if gte mso 9]> Normal 0 21 false false false ES X-NONE X-NONE MicrosoftInternetExplorer4

“Mediante el estudio de la Historia podemos adelantarnos a acontecimientos similares que a lo largo de la vida de nuestro planeta parecen sucederse. El ser humano es una criatura inteligente pero obstinada que suele caer una y otra vez en un mismo error creyendo que ya lo tenía superado. Es gracias a este sentimiento insistente que hemos llegado tan lejos como animales, dejando muy atrás nuestro salvaje pasado. Evolucionamos muy rápido, quizás demasiado a prisa, y a cada día que pasa somos mejores que ayer. Aún así, nos queda mucho por aprender.

Los humanos estábamos preparados ante el mundo, pero el mundo no estaba preparado ante nosotros. El Día del Cambio era inminente, inevitable y necesario. Aún en día hay quienes no lo quieren aceptar, ocultos y en silencio entre una destacable minoría. No sabemos cómo ocurrió; esperábamos que la naturaleza nos devolviera de alguna forma el golpe que le habíamos propinado, pero nunca llegaríamos a imaginar que ocurriera de esta forma.

Alimañas salvajes, bestias bípedas o tótems, para aquellos que lo quieren ver desde un punto de vista espiritual. Condenados o bendecidos ¿Quiénes son? ¿De dónde vienen? ¿Por qué están aquí? El CMT fue fundado para dar respuestas a todas tus dudas, hemos recogido desde hechos históricos hasta cuentos populares, todo lo que pudiera estudiarse para mostrar al mundo la realidad, lo que ocurrió de verdad. Tú, amigo, eres parte de nosotros.

BIENVENIDO AL CLUB MEDUSA TUBULAR”

<!--[if !supportLists]-->-          ¡Qué rollo! Me pregunto para qué mierda nos puede servir aprendernos un montón de cosas que ya han pasado, que ya hemos superado y, algunas, que hasta queremos olvidar. Es ridículo que nos hagan estudiar esto. – deja el libro en el bolsillo del asiento delantero y se abre paso entre los otros dos pasajeros hacia el minúsculo baño del avión. De repente y como de costumbre, la culpabilidad lo vuelve a tomar al verse reflejado en el espejo. – He dejado atrás un trabajo y una familia, una vida estable con pocas responsabilidades y casi ningún lujo del que privarse… en busca de la felicidad. Una felicidad de la que no dudo, pero que me asusta. No sé si he hecho lo correcto, el corazón me quiere explotar de la emoción y mi cabeza lo quiere hacer de la preocupación.<!--[endif]-->

Ant era un chaval de unos 15 o 16 años, algo pesimista pero atrevido; el probar nuevas cosas y superarse era algo que lograba entusiasmarlo de sobremanera, el problema era que ese entusiasmo siempre traía consigo una dramática cara opuesta que lo llevaba a aterrorizarse innecesariamente si las cosas no salían como él esperaba. Era torpe, de aspecto descuidado, con varios problemas físicos y de salud; muy malo a la hora de socializar con el resto de personas que lo rodeaban. Ant destacaba en su inteligencia pero su falta de interés y de iniciativa lo había llevado a estancarse en el presente sin una visión de futuro.

Con un golpe al espejo pudo contener un poco las lágrimas y desahogar su estúpido sentimentalismo, hacerse un poco más fuerte y afrontar las novedades con optimismo y buen humor. Abrió la puerta del servicio y salió con paso rápido tropezando con otro alumno que se movía agitado a la misma altura que él en el pasillo de la aeronave. – Disculpa de verdad… yo… - No hubo respuesta, solo hostilidad por parte del accidentado. Las pantallas sobre los asientos habían descendido y ponían un documental sobre la CMT.

“El Club Medusa Tubular es una institución de renombre, famosa por su alto índice de promociones y el bajo coste de alistamiento. Prepara jóvenes de todo el mundo dispuestos a investigar en cualquier rama científica cada uno de los aspectos del mundo actual: un mundo que prácticamente se ha reiniciado años atrás de una misteriosa manera que nadie ha llegado a entender, haciendo que cambiáramos nuestra forma de ver y entender las cosas que nos rodean, de formular nuevas hipótesis y demostrar nuevas teorías.

Una maravilla de la naturaleza perfeccionada a manos del hombre situada en mitad de Ypslom, el océano más frío del planeta, leyenda de los mares, Isla Tubular, es el lugar de reunión de nuestras jóvenes promesas, vosotros. En su interior, Aquavita Tubineus, la criatura que nos da nombre, una gigantesca medusa tubular arrancada de las profundidades del mismísimo Ypslom.”

            Ypslom. Ant no pudo evitar mirar por la ventanilla al inmenso océano que sobrevolaban. Había recordado el terrible pánico que siente al mar y a todo lo que bajo él se pueda hallar, todos temen al mar, nadie está seguro de lo que ha pasado bajo él todo estos años después del Día del Cambio. Falsas islas de algas pardas flotaban al azar a lo largo del húmedo paisaje, prisión u hogar según para qué animal marino.

            Ant seguía ojeando por encima su libro de texto, saltándose todas las partes que consideraba aburridas, esas que trataban de Historia o Política. El siguiente tema narraba una delirante historia, obviamente debía ser un cuento popular, hablaba de un tipo atormentado y marginado, cansado de una realidad que no quería aceptar, derrotado, destrozado… Rebosaba de un dramatismo que no alcanzaba a entender, pero parecía importante. Humanos, naturaleza, animales, transformaciones y antropomorfos, todo surgido de la nada, sin más. “El Comienzo de una Leyenda”.